LOS HOMBRES DE LA GUADAÑA Por José Ramón Gómez Cabezas
El sello Tusquets desde hace bastante tiempo es sinónimo de calidad. En esta editorial que acaba de cumplir 40 años, los aficionados al género negro hemos disfrutado con las publicaciones de Mankell, Petros Markaris, Eugenio Fuentes y como no, las estupendas novelas protagonizadas por Charlie Parker el poderoso detective creado por el irlandés John Connolly.
Los hombres de la guadaña es la séptima novela de la serie Parker (Todo lo que muere, el poder de las tinieblas, Perfil asesino, El camino blanco, El ángel negro, Los atormentados) y en ella, lo primero que nos puede sorprender es que los protagonistas principales son Louis y Ángel, esa curiosa pareja, en todos los sentidos, de mercenarios a sueldo, fieles amigos del Detective. Será este el que les ayude a ellos y no al revés como viene sucediendo en la serie, para llegar hasta el final en la persecución vital a la que se está viendo sometido Louis por los muertos del pasado. Quizá demasiadas victimas en ese armario de otros tiempos que ahora rebosa.
Ventura otro antiguo conocido de la pareja y miembro de los hombres de la guadaña ha recibido el encargo de acabar con esa maquina perfecta de matar que fue Louis. Trazos del pasado vendrán para reclamarle venganza y no se detendrán hasta ajustar cuentas. Ángel, su pareja, que ya recibiera lo suyo en la anterior entrega El camino Blanco, estará a su lado, al igual que Parker, Willie y Arno, hasta su mentor Gabriel estarán ahí para intentar ayudarle demostrando que incluso en el oscuro mundo de Connolly existen valores tan importantes como la amistad.
Este autor irlandés maneja como nadie el concepto narrativo del suspense. La crueldad de sus escenas viene domesticada por un estilo literario exquisito. Los diálogos precisos hacen que el texto prescinda de excesos y la tensión narrativa que se va acumulando convierten a sus novelas en un elemento adictivo e imprescindible. En esta novela hay un reto adicional, convertir a la pareja de asesinos a sueldo en un objetivo frágil sin perder un ápice de credibilidad y Connolly lo logra. Los flasbacks continuos que encontramos, poco a poco nos van implicando en la profundidad de la trama, además con su narración fluida y aparentemente sencilla, el autor va construyendo una historia que habrá quién diga que no es la mejor de la serie, da igual porque igualmente resulta imprescindible.
John Connolly un autor de obligada lectura para todos los buenos amantes de la novela negra y Los hombres de la Guadaña uno de esos libros que sacian nuestras ansias de literatura de calidad.
LOS HOMBRES DE LA GUADAÑA.
John Connolly.
TUSQUETS, 2009.
0 comentarios